Nuestra Misión

Como estudiantes del Colegio San Ignacio de Loyola, sentimos la urgencia de tomar acción ante una de las crisis más violentas que enfrenta Puerto Rico: el feminicidio y la violencia de género. Nuestra misión se enfoca en aumentar la conciencia sobre la crisis de feminicidio que enfrentamos como sociedad y ayudar a fomentar una cultura de respeto y igualdad de género en nuestra isla que tanto amamos, especialmente en la juventud puertorriqueña del presente.

En Puerto Rico, la crisis de feminicidio ha llegado a niveles que nadie se esperaba. Según el Observatorio de Equidad de Género, docenas de mujeres son asesinadas cada año en Puerto Rico a causa de violencia de género, y muchas mujeres actualmente viven bajo un ambiente de amenazas y abuso constante en su hogar. Desde 2020 hasta 2025, el femicidio en la isla aumentó aproximadamente un 180% debido a que hubo treinta y un casos más en lo que vamos de 2025 (hasta agosto de 2025) que en 2020. Creemos que cada una de estas víctimas presenta una vida truncada y nos recuerda el sanamiento que necesita nuestra sociedad. Más que un conjunto de estadísticas, la crisis de feminicidio en Puerto Rico requiere conciencia, empatía y acción colectiva de parte de nuestra sociedad. 

Desde que empezó nuestra formación Ignaciana, creemos que el primer paso para que ocurra cambio es la educación del individuo. Al ser cuatro jóvenes puertorriqueños, queremos inspirar a otros jóvenes de la isla que reconozcan su rol en el desarrollo de una sociedad más justa y segura para la mujer y para todos. Para nosotros, ser hombre no significa que seas la figura dominante, sino que seas alguien que respeta, cuida y acompaña. 

Nuestra campaña valora grandemente los valores jesuitas de la fe que hace justicia, el servicio al prójimo y la búsqueda del Magis, siempre dando lo mejor de nosotros por el bienestar común. Queremos que esta campaña pueda informar y educar a muchos estudiantes de la isla y la juventud puertorriqueña como tal para que el futuro de Puerto Rico sea igual de brillante que el sol. Los cuatro soñamos con un país donde la mujer pueda vivir sin miedo de que muera a causa de violencia de género o feminicidio y que cada joven pueda entender que el cambio empieza con nosotros. Por ellas, por todos, y por un Puerto Rico donde la violencia hacia la mujer pare por completo.